Había una vez un perro que tenia dueño, el perro se llamaba Tomi, un día vino un perro que quería jugar con el
Pero el perro Tomi dijo: ¿Que?
No jugare con tigo porque no tienes dueño, yo solo juego con los que tienen dueño.
Y el se fue a otra parte,
El Tomi se sentía culpable
Y se dijo: me siento culpable por lo que paso,
No importa.
Y se fue a la casa,
El dueño fue a comprar y el perro quería ir con el pero no lo dejaron.
Al rato el se puso triste porque no tenia nadie con quien jugar y justo paso el perro que quería jugar con el, y Tomi le pregunto: quieres jugar con migo, y le contesto: ¡NO! Y se puso triste, y no volvió a ser envidioso nunca más.
Moraleja: nunca seas envidioso o nunca tendrás lo que querrás
Autor: Sofía Cuevas Morales
viernes, 19 de junio de 2009
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1 comentario:
es muy vueno deja una muy vuena enceñansa y deja una cosa que sirve para los niños y adultos que es no ser envidioso con los demas o con los que no lo tienen ojala que todos lo leyeran.
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