El león y el perro

Había una vez un león y un perro que estaban jugando tenis en la cancha de África pero lo único malo que el león era picota se picaba por todo. El perro si perdía lo aceptaba y además era muy tranquilito. Ya volvamos al partido de tenis el perro iba ganando el león ya se estaba picando el puntaje es el siguiente: 1 sed ganó el perro seis dos el segundo seis cuatro al tercer sed todo iba bien pero el león abandono el partido porque estaba perdiendo y el perro ahí estaba muy tranquilito lo único que le daba rabia al perro era que el no le gustaban las personas que se pican el perro siempre se dijo en su cabeza no pierdas las esperanzas y no picarse


Moraleja: no pierdas las esperanzas ni te piques

Autor: Maximiliano Araya